byGolan_Trevize43M Sadist
Para empezar, se debe entender que la Humillación y la Degradación son totalmente distintas. La humillación erótica y la degradación erótica no son lo mismo, aunque a menudo se habla de manera que pueden interactuar y agruparse como "humillación y degradación" en una sola dinámica en el BDSM
Son muchas las emociones que podemos sentir de manera intensa. La culpa, la ira, la tristeza y la rabia son algunas de ellas. Sin embargo, hay una que no hemos mencionado y que provoca un impacto tan fuerte que puede llegar a destrozarnos es: la humillación.
La humillación es un estado emocional que deja una profunda huella en cada uno de nosotros. Sentir que carecemos de valía, que somos mediocres, que hagamos lo que hagamos quedaremos en ridículo, es una cruz que podemos arrastrar durante largo tiempo. En cambio la Degradación es la disminución de la dignidad de una persona o la categoría moral de una cosa siempre y cuando, esa persona acepte esa dinámica, de forma consensuada, para el placer de disfrutar de esta.
Se puede decir, que la Degradación, es una dinámica que usa la humillación, la vergüenza, como herramientas principales para ejecutarlas en una persona, que logra ser una interacción sexual, mental y física, siempre y cuando se tenga consenso en ello.
La humillación es un estado mental, y lo que humilla a una persona no puede humillar a otra. Por ejemplo, decirle a un hombre que tiene un pene pequeño puede ser humillante, si daña su dignidad o reduce su autoestima. Sin embargo, no necesariamente es degradante. Hacerlo un cornudo público podría ser degradante porque a los ojos del mundo y de él mismo le haría algo menos de lo que era.
La Universidad de Ámsterdam realizó un estudio en el que participaron 46 voluntarios con el objetivo de comparar sus reacciones antes diferentes estados emocionales. Los investigadores analizaron las ondas cerebrales de los participantes mientras veían en una pantalla insultos y halagos.
También se les contó a los participantes diversas historias en las que tenían que ponerse en la piel del protagonista. De esta forma, serían capaces de conectar su emoción al ponerse en su lugar. Por ejemplo, una de las situaciones consistía en que acudían a una cita y en cuanto la persona con la que habían quedado les veía, se daba la vuelta y se iba.
Los investigadores descubrieron que el sentimiento de humillación ocasionaba una actividad cerebral mucho más rápida e intensa que la alegría, más negativa que la ira, y que además, las áreas vinculadas al dolor se activaban.
Aunque los halagos despertaban alegría, el sentimiento de humillación era mucho más intenso que esa emoción tan placentera. Pero, lo más increíble, es que incluso se observó que no podía competir con la ira. Los insultos hacía que muchos de los participantes se enfadasen o se mostrasen molestos, no obstante la humillación tenía una carga mucho más negativa.
¿Cuando es degradación y humillación?
La humillación erótica es el uso consensual de la humillación psicológica en un contexto sexual. Por el cual una persona gana excitación o excitación erótica de las poderosas emociones del ser humillado y degradado, o de humillar, degradar a otro; a menudo, pero no siempre, se acompaña de estimulación sexual de uno o ambos miembros de la pareja en la actividad.
La humillación no necesita ser de naturaleza sexual; como ocurre con muchas otras actividades sexuales, son los sentimientos derivados de ella los que se buscan, independientemente de la naturaleza de la actividad real. Por lo general, se trata de un sentimiento de sumisión por la persona que es humillada, y de dominio, por la persona que hace la humillación.
Puede ser verbal o físico, o en privado o público. A menudo se puede ritualizar y, a diferencia de algunas variaciones sexuales, también se puede llevar a cabo fácilmente a larga distancia (como en línea). La humillación es un ejemplo de la dinámica de poder que existe en una relación Dominante/sumisa(o) o Master (Mistress, Amo, Ama)/esclava(o). Por ejemplo, en una actividad como el Spanking, el efecto buscado es principalmente la humillación; la actividad es solo un medio para ese fin.
También puede ser parte del sadomasoquismo emocional, que no siempre tiene un elemento Dominante/sumisa(o). Alguna humillación sexual implica un dolor físico que se inflige, pero mucha de ella está mucho más relacionada con el ridículo, la burla, la degradación y la vergüenza.
El juego de humillación puede llevarse a un punto en que se vuelve emocional o psicológicamente angustiante para uno u otro compañero, especialmente si es una humillación pública. La humillación erótica puede llegar a ser lo suficientemente extrema como para ser considerada una forma de juego bordeline, juegos extremo, o juego borde.
Es importante entender, que la humillación y la degradación erótica se basan firmemente en el consentimiento, en lo consensuado. Si no hay consentimiento, entonces es abusivo. Esto no tiene que ser consentimiento dado en ese momento exacto, podría ser un acuerdo entre la pareja de consentimiento sin consentimiento o como se tiene presente ese "Racsa" que tanto usamos los que estamos dentro de las relaciones sadomasoquistas (S/m, SM).
Un poco de psicología de la humillación y la degradación.
La humillación en general estimula las mismas regiones del cerebro que están asociadas con el dolor físico, con la inferencia de que los humanos evolucionaron para recordar las recompensas sociales y los castigos tan fuertemente como recuerdan la recompensa física o el dolor en respuesta a su entorno. Al igual que con cualquier forma de experimentación del dolor en un contexto sexual, el consentimiento y (paradójicamente) un alto grado de conciencia y comunicación son necesarios para garantizar que el resultado sea deseable, en lugar de abusivo. Por ejemplo, un sumiso puede disfrutar de ser insultado de alguna manera, pero puede ser realmente castrado y devastado si es humillado o insultado de otras maneras.
El juego de la humillación también está conectado con el fetichismo sexual, en el que las actividades no sexuales pueden volverse sexuales al relacionarse con la excitación, y también pueden asociarse al exhibicionismo en el sentido de querer que otros den testimonio (o que otros se den cuenta) de la degradación sexual.
Para algunas personas, actividades como los insultos son una forma de lograr la reducción del ego o superar las inhibiciones sexuales. Por ejemplo, entre personas homosexuales, pueden usarse términos generalmente asociados con la homofobia, como el "marica" y "camionera"...
Al igual que con todas las actividades sexuales, algunas personas tienen fantasías sexuales sobre la humillación, y otras lo hacen como estilo de vida o en una escena. Las fantasías sexuales relacionadas con la humillación leve son comunes. Algunos juegos de rol de humillación (Petplay y Ageplay en particular) se combinan con lealtad y cuidado en la medida en que estos fetiches se pueden ver como ejercicios de confianza en lugar de como un fetiche de humillación. El deseo de estar debajo de la otra pareja durante el coito, la idea de "quedar atrapado" (como tener relaciones sexuales en el jardín o en el bosque) y fantasías leves de violación (en las que las personas se imaginan a sí mismas forzadas de la manera que les gustaría, y que son diferentes de cualquier forma real de violación) son juegos emocionales leves que enfatizan el estado, la vulnerabilidad y el control.
Sin embargo, para la mayoría de las personas, tales ideas siguen siendo fantasías; la gente tendría fuertes reservas acerca de que las fantasías se hicieran públicas, o se comprometieran con un compañero en la vida real, por más erótica que sea la idea. Cuando alguien revela un fetiche a un compañero, esto generalmente es el resultado de una gran confianza. Sin embargo, el deseo de ser humillado puede ser una causa motivante para la confesión, ya que el acto de confesar puede ser en sí mismo humillante. Muchas personas se preocupan por ser ridiculizadas por sus fetiches, y tal ridículo por parte de sus parejas podría ser psicológicamente catastrófico. Por lo tanto, muchas personas usan la humillación en línea (en la cual el humillante y otros están involucrados a través de Internet, usando chat, correo electrónico, sitios web, etc.) como un compromiso entre el exhibicionismo y la realidad por un lado, y la seguridad y el anonimato por el otro.
La humillación es una emoción que está presente en el día a día. De hecho, muchas personas no son capaces de comunicarse si no es humillando a los demás, creyendo que en realidad les están haciendo un bien. Sin embargo, carecen de la empatía necesaria para transmitir lo que quieren decir de una manera más agradable y sutil. Un ejemplo sería aquella madre que alaba al compañero de su hijo y lo señala como un referente en diversas tareas y comportamientos. Sin saberlo, puede estar despreciando el esfuerzo de su hijo. Si esta comparación la realiza estando ambos niños presentes, el malestar de su hijo puede ser aún mayor por la humillación recibida. Situaciones de este tipo abundan en nuestros días, sobre todo en el ámbito laboral. Incluso, en las relaciones de pareja esta emoción también puede estar presente. Aparece cuando uno de los miembros se burla del otro y le hace sentir inferior. Por ende, se debe tener cuidado, ya que este tipo de dinámica si es bien llevada, termina en el placer de los involucrados, pero, si sucede algún error, será catastrófico para los involucrados, por aquel que ejecuta y por el otro lado, el que recibe.
La humillación es una emoción desagradable e intensa que suele perdurar en el tiempo por la profundidad de su herida. Afecta a nuestra autoestima y de algún modo hace que sea muy complicado volver a aumentarla, si no sucede bajo el termino de lo consensuado.
¿Qué puede humillar o degradar?
En gran medida, lo que es humillante o degradante es bastante individual y varía mucho de persona a persona. El Petplay se menciona varias veces en este artículo como degradante, pero, algunas amistades que conozco, el juego del Petplay no es nada de lo anterior y estarían totalmente en desacuerdo. Lo mismo ocurre con el Ageplay, el exhibicionismo, el travestimos, la servidumbre y casi todo lo demás en la lista. La "humillación" de una persona no es necesariamente es la de otra persona.
Algunos escenarios pueden basarse en el abuso verbal y otros en aspectos físicos. Algunos ejemplos posibles son:
Humillación y degradación verbal.
Humillación física y degradación.
Lo que se debe y no se debe hacer durante o en el proceso de humillación.
Estas son algunas de las cosas que debe hacer al utilizar la humillación como forma de entrenamiento:
Cuanto más practique la dinámica de humillación para divertirse, o entrenamiento, más se beneficiarán ambos. Comprenderá cómo motivar a su esclava, sumisa o masoquista para ayudarla a pasar por momentos de sentirse muy vulnerable. Y la esclava, sumisa o masoquista entenderá que su entrenamiento les permite enfrentar sus miedos y seguir haciendo lo que se les pide.
Que no hacer en las dinámicas o entrenamiento de Humillación.
En cualquier entrenamiento BDSM, hay cosas que NO DEBES HACER, ya que pueden causar daño a tu esclavo y pueden comenzar a ser abusivas en lugar de apoyar el crecimiento.
byGolan_Trevize43M Sadist
Cuando digo Dominante, puede ser Amo, Ama, Mistress, Master, Sadist, Sádico, Sádica, esposo, esposa, etc.. es el rol Dominante.
Esta discusión se creo a partir de una conversación que tuve con una amiga, sobre la introducción al sexo anal de manera exitosa en una relación. Está escrito desde la perspectiva de un hombre heterosexual, Dominante, Sádico con más de 30 años y que nunca ha tenido un pene dentro de su culo, así que estoy dispuesto a ser corregido de forma educada. Si alguien tiene una sugerencia, una acotación, opinión, por favor agregue sus ideas en la parte correspondiente de la publicación...
Jamás y nunca ha habido un escena realista del sexo anal en alguna porno
Esta es la regla número uno, y la más importante por una simple razón. La mayoría de nosotros los hombres (y algunas mujeres, vamos a aceptarlo) que conozco crecieron y tomaron muchas de las escenas pornográficas que han visto como las claves y tips para tener sexo con alguien más. En esencia, todo lo que se trata de sexo anal, que has visto, imaginado, y siempre has querido intentar, desechaló, botaló, tiraló por la ventana...
Hay varias razones, pero una de las más significativas es la siguiente: las mujeres en el porno que va a hacer una escena anal, se preparan ampliamente para que estén listas cuando la cámara empiece a rodar. Si tú tomas un acercamiento de la escena porno, verás lo que les digo. Si estas con alguien, por ejemplo tu pareja, esposa, novia, sumisa, esclava, etc.., vas a terminar con una mujer realmente enfadada a tal punto que... desearas haber muerto, por haber intentado tener sexo anal sin prepararse.
No puedo contar el número de mujeres que he conocido que han escrito, dicho, expresado, inclusive dibujado (para aquellos más limítrofes) que el sexo anal fuera una primera experiencia horrible. No seas su primera experiencia horrible. No seas una estrella porno con ella.
Lubricante lubricante lubricante
Espero que sea realmente explicativo, pero en caso de que no se pueda decir nuevamente, lubricante
A ver, tendré que hacer dibujitos: El cuerpo produce su propio lubricante natural. Pero, en ocasiones y debido a algunas disfunciones físicas o emocionales, o por falta de estimulación previa o excitación, ésta no es posible, sobre todo en las mujeres.
Como el ano no produce ningún tipo de lubricación natural, es súper importante que haya una lubricación externa artificial. ¡Atención! Que sea a base de agua o silicona, porque los lubricantes que son aceitosos van a interferir con la integridad del látex del condón, y es importante contar con esa barrera para ese tipo de relación sexual. Nunca deben usar un gel íntimo que adormezca el área. Esos geles que prometen sexo anal sin dolor anestesian el área ya que contienen lidocaína, un analgésico que funciona como anestesia local, pero ustedes necesitan saber lo que está pasando allí para darse cuenta si algo les está haciendo daño.
Ir a su ritmo
Habrá un montón de "parar" y "seguir". Si ella dice "para" (o la palabra de seguridad) o el "podemos esperar un minuto", parar y esperar durante unos minutos. Besarla, acariciarla, tocarla, sobarla, hablarle bonito, funciona la mayoría de las veces para continuar... "déjate querer"... Claro, esto es, cuando tienes una relación vainilla... por supuesto no es así cuando estas dentro de la relación BDSM, cuando muchas personas buscan es producir dolor para alcanzar placer. Pero, incluso dentro de el estilo de vida BDSM, debes tener un ritmo, y es preferible ir al ritmo de ella, si no quieren terminar en un hospital y por supuesto, tu pagando las cuentas...
Es muy importante que la persona que recibe la penetración anal esté en control de los movimientos al comienzo de la relación activa penetrativa. Como quien recibe la penetración es quien puede sentir dolor, cuando esa persona está a cargo de los movimientos puede detener la actividad sexual o acomodarse de manera que no se haga daño. Una vez que están dándose bombeadas de manera regular y cómoda puedes tomar el control de la situación.
Tensión
Es muy probable que vaya a estar tensa las primeras veces que lo hace. La tensión es un asesino natural en el sexo. Esa persona que esta física y mentalmente fuera de si, al punto de más tensión, y encima de eso, vas directamente al área más apretada de su cuerpo... Aunque su mente quiera, desee hacerlo, su cuerpo puede tener otras ideas.
La tensión puede provenir de un par de fuentes:
Respirar
Permanecer relajado mientras algo doloroso-placentero está sucediendo a tú cuerpo es difícil, pero la respiración boca abierta ayuda (si, abres la boca y respiras por ella). Manténgase atento a ella y recuerde suavemente - será doloroso al principio y muchas veces inhalamos bruscamente y mantenemos nuestra respiración cuando algo es doloroso (piensa cuando recibes una inyección en el médico, por ejemplo). Puede que se olvide de empezar de nuevo, o respirar superficialmente. Las respiraciones profundas ayudan.
El esfínter es un músculo
A menudo oigo hablar de mujeres preocupadas por "estirarse". "Ella estará suelta "allá atrás" después. No es así como funciona el cuerpo. El esfínter es un músculo, y como todos los músculos si se ejercita se volverá más flexibles y flexibles. Usted no iría a yoga y se preocuparía que sus brazos o piernas iban a estar todos "estirados". Piense en el sexo anal como yoga para su culo.
Preparación
Si tú encuentras que te gusta el sexo anal y quiere disfrutar del sexo anal, entonces preparese para ello. Comprar un buttplug o tres. Si piensas que vas a tener sexo anal esa noche, inserte su buttplug preferido y disfrute. Busque uno que sea análogo al tamaño de la polla, pene, güevo de su amante, dominante, Amo, o del tamaño que considere adecuado para ti.
Deben comenzar con la penetración anal de a poquito, distendiendo los esfínteres anales. Para ello, usen un dedito o un consolador anal, que tiene la punta más finita y se va ensanchando gradualmente y cuenta con una base para que no se pierda por el recto. Eso hace que la dilatación anal sea paulatina y, combinada con la lubricación, la relajación y la excitación del momento erótico, ¡no falla! Tengan en cuenta que el glande es la parte más gruesa del pene, por eso hay tanta incomodidad cuando se comienza sin el uso de un dedito o de un consolador anal.
El desorden (en mi país le decimos de otra forma)
Habrá un lío, y nunca es "su lío", siempre es "nuestro lío". La diferencia semántica es crítica acá. Puede haber salido de su cuerpo, pero la única razón que lo hizo fue porque pusiste tu verga ahí. Repitiendo: habrá algún lío. Consiga hacer algo sobre eso o no pegue su polla, pene, güevo, verga en el culo de alguien más.
Sexo luego Cena
Un amigo gay y una gran amiga me han señalado esto. El sexo anal es como nadar, probablemente mejor no hacerlo justo después de una comida grande. Piénsalo.
Lo vuelvo a repetir: piénsalo
Estimulación del clítoris
He conocido a mujeres para quienes la estimulación del clítoris puede ayudar a relajar o distraerlas ya que están facilitando el sexo anal. Conozco a mujeres que lo encuentran sin importancia o de muy mal gusto (hay de todo en la viña del señor). Esta es una conversación que debes tener con tu pareja antes de hacer cualquier avance.
Su culo y su coño
Nada que haya estado dentro de su culo debe hacer contacto con su coño. Nada. Este es otro punto donde el porno es muy mala información. En el porno, los actores van y vienen entre el recto y el coño como si fueran intercambiables. Mala idea.
Naturalmente, el recto está lleno de bacterias que tiene el potencial de causar una infección. Sexo vaginal después del sexo anal es una idea terrible - transfiere esas bacterias a su coño, que causará todo tipo de dolorosas infecciones vaginales y del tracto urinario.
Como escribí en un principio... Si tienen algo que añadir, criticar, inclusive opinar, mientras sea educadamente mejor... Las criticas constructivas a veces tienden a mal interpretarse como ataques irracionales (si, muchas veces como te expresas de manera escrita, es la estructura de tu pensamiento, así que cuida la forma en que escribes, ya que será la manera en que tu mente se desenvuelve)
Golan Trevize aka Cristhianced
Asteria {mi señor}
Sólo tú sabes cómo excitarme. Sólo tú sabes qué me gusta. Sólo tú sabes cómo hacerme perder el control. Sólo tú sabes qué hace revolverme en el placer. Sólo tú me haces llegar al clímax. Sólo tú puedes hacerme mezclar sentimiento con carne. Sólo tú sabes qué palabras me excitan. Sólo tú sabes qué espero.
Sólo tú conoces mis secretos. Sólo tú conoces mis deseos más ocultos. Sólo tú conoces mis más profundos defectos. Sólo tú sabes sacar las mayores de mis virtudes. Sólo tú me das confianza. Sólo tú me la puedes quitar.
Sólo tú me sabes domar. Sólo tú me sabes controlar. Sólo tú sabes abrirme o cerrarme. Sólo tú tienes el poder.
Sólo tú. Tú.
Veo la lluvia de críticas, de comentarios misogenos, y una parranda de quejas que acá no vienen al caso. Saben al menos todos los que me leen que siempre he escrito desde el punto de vista del Dominante, del Sádico, en el estilo de vida BDSM. Así que, unos consejitos:
- Encuentra su límite de tolerancia: primero golpéala suavemente y luego aumenta gradualmente la fuerza de cada bofetada si ves que puede soportarlo.
- Siempre ve, que cierre la boca antes de la bofetada para evitar los dientes que le corten dentro de la boca durante la bofetada, por ejemplo, la parte interna del cachete, los labios.
- Siempre la golpeó en la mandíbula. Nunca te acerques al oído (riesgo de pérdida de audición), nariz (peligro de sangrado nasal) u ojos. Cualquier golpe sobre el pómulo (alrededor del ojo) le déjará un ojo morado sin remedio.
- Si quieres darle una bofetada fuerte en una mejilla, entonces es útil sostener su otra mejilla con la otra mano. Esto se hace para evitar un fuerte "efecto latigazo" en su cabeza.
- Mantenga las uñas cortadas y limpias para evitar cortes accidentales e infecciones.
- Evite abofetearla como castigo / disciplina. Ella tiene un trasero (bastante prominente algunas, otras no tan agraciadas, pero tienen) y algunos muslos sensibles que se pueden usar para ese propósito. Es mucho más seguro golpear que su cara. Úsalos, a todos ellos (nalgas, muslos, y otras zonas) como primera alternativa si es un castigo.
- Nunca la abofetees con ira.
- Una buena bofetada pone a una niña traviesa o malcriada inmediatamente en su lugar. La hace callar de inmediato, por lo que es realmente efectiva contra una chica que habla mal o se porte mal, es una dinámica interesante de humillación pública, que normalmente trae lágrimas instantáneas de parte de la sumisa o masoquista, algunas veces de rabia, otras veces es de diferentes tipos de sentimientos encontrados. De forma segura se puede decir que descalabra totalmente cuando ejecutas esta dinámica. Pero puede ser una herramienta severa, por lo que debe usarse con cuidado.
Recuerde: las mujeres son seres delicados y fáciles de romper. Mejor juega con tus juguetes sin romperlos ... ¡para que puedas seguir jugando!
Me sentí avergonzada, aterrorizada al descubrir mi maestro mi impúdico secreto, pero reaccioné de la única manera posible frente un macho como él, grande y fuerte: me di la vuelta, y mirándole con ojos turbios... qué hermosos labios tiene, mmmmmmmm, que delicia sus piernas fuertes y esbeltas, encendida de pasión le dije: “fóllame, mi señor, fóllame, maestro”. Entonces de un solo zarandeo me subió a sus muslos dejando mi culo en pompa y comenzó a azotarme con la mano muy fuertemente. Unas veces su mano caía sobre el nacimiento de mis nalgas, otras sus dedos alcanzaban mi húmedo y tembloroso coño como pequeños latigazos.
_ ¿Qué es todo esto, esclava? Cuéntame tus fantasías ahora mismo! – y lanzaba su mano contra mis nalgas dejando dolorosas marcas
_ ¡Ay, amo, siiiigueee, no pares... maestro!
_ ¿Qué estabas imaginando? Cuéntamelo ahora mismo!
_ El toooro, mi señor, ayyyyy, maestro, aaamoooo – me ardían las nalgas, pero deseaba aquel castigo. Con cada azote mi coño jugoso rebotaba sobre su muslo. Yo me retorcía cual furcia gozosa restregándome contra él. Junger se puso de pie y me hizo caer al suelo. Me arrastré hasta sus piernas, me agarró del pelo y me dio un bofetón, pero yo no podía parar ni siquiera por el dolor, estaba poseída de un frenesí, deseaba al amo más que nada en el mundo. El toro era el maestro, joder, era él. Me agarró de las axilas y me puso en pie, metió su mano derecha entre mis piernas para luego mostrármela mojada.
_ Tienes el coño palpitando, zorra – sus ojos estaban encendidos, me tiró de un empujón en la cama – ¡Mastúrbate, esclava, enséñamelo bien abierto! Lo hice. Jadeaba mientras imploraba que me montara.
Se quitó el bañador, que era la única pieza de ropa que llevaba, dejando su erecta polla al aire. Sujetó mis tobillos con fuerza alzando mis piernas de golpe. Fue tirando de ellos hasta tener mi sexo a la altura de su boca y empezó a mordisquearlo y a lamerlo entre gruñidos, saboreándolo. Yo estaba enloquecida de placer, por dos veces llegué al orgasmo con la lengua y los dedos del maestro entrando y saliendo rápido de mi sexo. Luego él volvió a tirar de mis piernas para acercar mi cuerpo al suyo, y a horcajadas, agarrándome por las caderas me penetró vigorosamente, a lo bestia. Sus huevos chocaban contra mis heridas nalgas, su polla me reventaba por dentro a cada embestida, quemando como una brasa. Cuando noté el temblor de su orgasmo, y su semen corrió por mis entrañas como un río caliente, una ola de placer me subió del sexo a la garganta atravesándome toda. Grité. Me agarré fuerte a sus nalgas para extraer con las convulsiones de mi coño hasta la última gota de su semen, que luego chorreó largamente por mi raja cuando ya reposaba en la cama, tan satisfecha. Él estaba empapado de sudor. Se tiró boca arriba con las piernas abiertas y los brazos extendidos.
Cuando recuperó el aliento, me pasó el brazo por detrás de la cabeza y me atrajo hacia él. El vello de su pecho me hacía cosquillas en la cara. Aspire el penetrante olor a macho que desprendía, mis fosas nasales se abrieron para ser inundadas por esa delicia de hormonas. En sus brazos me sentía en la gloria, tan tierna, tan amada, amando tanto
_ Maestro– susurré
LA VENDA: La venda es un símbolo de confianza y de entrega ciega. Es el respeto y el control del amo sobre las acciones de la esclava, ya que es dueño absoluto en ese momento y es responsable de su sumisa, en sus manos está la ciega confianza de su esclava, que espera sin saber qué va a hacerla.
EL LATIGO, LA FUSTA: Son los instrumentos que más veneración despiertan en la sometida, vehículos del castigo y el gozo, símbolos de autoridad y dominio del amo. Un dominio consentido por la sumisa, que en el ritual de iniciación entrega por su propia mano a su dueño estos instrumentos, y con ellos su completa sumisión a sus deseos.
LA CADENA, LA CUERDA: Las ataduras simbolizan la total sumisión, quien se deja atar, se pone por completo en manos del amo. A veces en la iniciación se suele atar las manos de la sumisa con ataduras simples, o con una cadena fina, que puede ser rota con facilidad, al igual que basta la palabra de la sumisa pidiendo ser desatada para finalizar una sesión. Se entrega por voluntad propia, y es libre de marcharse. Algunos usan la fina cadena de plata para atar las manos de la sierva en su rito de iniciación. No es el grosor la que retiene la sumisa junto al amo, sino la pureza de la entrega, noble como la plata.LA MASCARA: Despojada de lo más elemental de su identidad, su rostro, la sometida se siente como un objeto a merced de los deseos del amo. Para la sierva, la máscara oculta emociones, miedos, sentimientos... para mostrar al sumiso que su entrega está por encima de sus emociones. Tiene que dar lo mejor, para ser digno de su aprobación.
LA MORDAZA, LA PALABRA: El uso de la mordaza requiere confianza entre amo y esclava. Si bien escuchar sus dudas, sus miedos, sus anhelos... A veces el silencio de la sumisa no indica que se sea un excelente amo...también se calla por devoción y respeto. Un buen amo ha de saber oír a su esclava, hasta cuando calla.
LAS BOTAS: Estar literalmente a los pies del amo, ser tan solo digna de besar sus pies... Suelo recordar a mi sumisa que no es preciso el uso de botas para pisotear su rebeldía y su orgullo. Próximo y con los pies en el suelo, cercano a su sierva para atenderla y enseñarle el camino.
A la muchacha:
La sumisión se ha practicado entre personas desde el amanecer de los tiempos. Se sanciona en escrituras y filosofías religiosas; ha sido el hecho más notable de la vida para mucha gente en esta tierra. La esclavitud es una condición humana.
El castigo de tu señor es un símbolo de interés y de preferencia por ti, sumisa. Anhelar a tu señor y sus días de castigo es una experiencia que demuestra una voluntad madura. Dedicas tu mente y tu cuerpo a tu señor y a su voluntad. Muchacha, no te entregas a una causa, no lo haces ni por dinero o gloria. Hay una semilla que empieza a crecer en ti.
La ceremonia
Esta ceremonia es importante. Hay que ir a ella convencida y resueltas las preguntas y las dudas con tu señor. Con este rito te entregas a una persona que será tu señor por un tiempo convenido. Antes de someterte debes entender que el cambio de tu estado actual al de sumisa será profundo y te afectará. El contrato no puede ser roto durante ese periodo y puede ser renovado o no a su finalización.
En la mesa se fija una vela encendida sin ninguna otra luz en el cuarto. Se coloca en frente el regalo. El señor está quieto a un lado de la mesa, la muchacha frente a él. Ella tiene los brazos caídos a lo largo del cuerpo y muestra las palmas de sus manos a su señor.
El consentimiento de ella
Señor: ¿Vienes aquí por tu propia voluntad libre?
Sumisa: Sí, vengo libremente.
Señor: ¿Aceptas libremente que te someterás a mi hasta la medianoche del día X del mes de X y del año XXXX?
Sumisa: Sí, soy desde ahora tu esclava hasta entonces.
Señor: ¿Juras solemnemente por todas las cosas que me darás cuanto pida totalmente, sometiéndote sin trabas a mi disfrute de ti durante ese tiempo?
Sumisa: Sí, lo juro por todo, mi señor.
Señor: Repite estas palabras: Juro solemnemente someter a tu voluntad, mi corazón.
Sumisa: Juro solemnemente someterme a tu voluntad, mi corazón (toca su pecho y toca el de su señor), mi mente (toca su frente y la de su señor) y mi alma (toca sus labios y luego los de su señor). Juro solemnemente obedecerte inmediatamente, sin reserva y sin vacilación en lo que me pidas. Juro solemnemente parecer hermosa a tus ojos, sonar graciosa en tus oídos.
(El señor levanta la barbilla de la esclava, que echa los pechos adelante)
Señor: Soy tu señor.
Sumisa: Eres mi señor.
Señor: Soy tu amo.
Sumisa: Eres mi amo
Señor: Soy tu dueño. Eres mi sierva. Eres mi esclava. Tu cuerpo es mío. Sirves mi voluntad. Tu boca es mía. Sirves mi palabra. Tu sexo es mío. Sirves mi placer.
Sumisa: Eres mi dueño, soy tu (el nombre elegido), soy tu esclava. Mi cuerpo es tuyo (la sumisa abre los brazos y lo deja en el aire en forma de T), mi boca es tuya, mi sexo es tuyo. Tu voluntad es la mía. Tus palabras son órdenes. Sirvo a tu placer.
(Después de esta declaración, el señor puede dar una palmada a la muchacha en la cara o la otra parte de su cuerpo y ella baja los brazos)
Señor: Ahora que he tomado la posesión de ti para el período, llevaré tu regalo como símbolo de todo lo que deseo gozar en ti. (El señor coge su regalo que la sumisa le ofrece con dos manos). Dame tu flor, símbolo de tu sometimiento (la sumisa da su flor y se arrodilla ante su señor, con las manos a la espalda de ella. El señor deshoja la flor, pétalo por el pétalo y la sumisa mira caer los pétalos). De la misma forma que he hecho uso esta flor, hago uso de ti. Ahora desnúdate. (La sumisa se quita la ropa y los adornos y vuelve a arrodillarse ante su señor, las manos unidas detrás de ella y las piernas levemente separadas).
(El señor fija sus condiciones)
Señor: Viniste desnuda a mí. (El señor pone en el cuello de la sumisa el collar del dominio). Lo usarás siempre que te lo ordene. (El señor coge la venda negra y con ella tapa la boca de la muchacha). Hablarás cuando lo ordene. Tu cuerpo está para mi placer. Muéstralo. (La sumisa alza sus caderas ofreciendo su sexo). Mi voluntad penetra las barreras de tu cuerpo. Ahora póstrate ante mí. (La sumisa de rodillas pone la cabeza en el suelo). Soy tu señor. No aceptarás más señor y sólo a mi me rogarás que te posea. (Pone un pie sobre la espalda de ella como símbolo del derecho de pernada).
El final
La sumisa ofrece al señor la posibilidad de azotarla, lo cuál hace éste o no, a su voluntad. La sumisa elige el instrumento de azote: fusta, látigo, toallas, las manos… Tras los azotes, el señor pone una cadena al collar de la sumisa y la conduce al lecho. Allí le quita la mordaza y con ella le venda los ojos. Es atada a la cama. El señor decide si dar o recibir placer. Puede hacerlo el tiempo que desee o hacer sencillamente un gesto ritual. Termina la ceremonia cuando la sumisa baja de la cama y se abraza a las piernas de su señor.
Cosas para el rito
Una mesa de altura normal.
Vela, blanca.
Regalo de sumisa a su señor: algo que la muchacha elige ofrecer porque simboliza la esencia de su sumisión.
Collar auxiliar y cadena (no unidos).
Azote, fusta o toalla no muy grande.
Consolador.
Venda negra para los ojos (colocada junto a la cama).
Vendas o cuerdas (atadas ya a las cuatro esquinas de la cama en la preparación).
Flor roja que la muchacha lleva como símbolo de su entrega.
Es deber de la muchacha asegurarse de que todo lo necesario está listo.
La muchacha
Vestido
La muchacha debe vestir con ropas donde deje claro que ella está ofreciendo su cuerpo a su señor y deben complacer su gusto. Ella debe perfumarse con cuidado. Vestirá al señor si él así lo desea.
Comportamiento general
La muchacha se comporta con humildad, sin ocultar sus partes sexuales a su señor. Su voz debe ser baja pero no un susurro y ella mantiene la cabeza baja en actitud de sumisión. En ningún caso puede corregir a su señor.
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¿Qué haces? ¿qué no harías? Aquí tienes el test para saber tus límites