Decidida por última vez a finalizar aquella tarea ordenada hace varios días atrás, cuya misión encontraba imposible al encontrarse con los obstáculos más temerosos de la naturaleza y moustrosos ojos implacables... finalmente... la ejecuta.
Lleva una tela fina, larga casi hasta los tobillos, semitransparente. A su alrededor, el agua la invoca, el viento cálido y las casas esquineras la invitan a desnudarse pero debe ser precavida, quizá alguno de sus vecinos puedan observarla. Mira y se encuentra sola. Bajo su tela, su cuerpo lastimado, herido, cicatrizado, desea liberarse de las cadenas de aquellos animales salvajes y de las ropas que le atormentan.
Dispone a capturar éste único momento. Saca una pequeña silla y recuesta su teléfono móvil en ella, apuntando hacía la piscina. Observa de nuevo, asegurándose de encontrárse sola, pero con plantas, insectos, aves y casas como testigos. Respira el aire cálido y sumerge sus pies en el agua tibia. Es ideal para su desnudez. Levanta la tela tan sólo un poco hacía la cintura, muestra su sexo y escucha el sonido de una motocicleta. De inmediato, la suelta, cayendo por efecto de la gravedad y uno de los vigilantes de la zona le saluda, ella responde en un tono nervio excitado y él continúa su camino.
Ella sube de nuevo aquella tela fina y se sienta en el agua. Su sexo pide más adrenalina. Le exige que se desnude completamente y se olvide de las miradas. Se pone de pie, y sube la tela a la altura de sus hombros, siente como su sexo y senos son libres y... nuevamente escucha un ruido de motocicleta... pero ésta vez, decide ignorarlo, piensa que su cuerpo debe ser contemplado por aquel pervertido que desee hacerlo, no lo ocultara pues debe cumplir su tarea. En el destino estará si la observan o no.
Queda completamente desnuda al aire libre y se siente vulnerable. Su cuerpo desea esconderse bajo el agua pero su mente le exige que se detenga unos minutos a disfrutar de su desnudez pública. Del sol en su esplendor, de la brisa en su piel, del miedo que produce ser pillada por alguna persona, de los sonidos que produce el viento en los árboles, el acercamiento de vehículos o quizá las voces de personas... Se entrega a sensaciones de libertad y vergüenza simultáneos y las soporta por algunos minutos.
Baja las escaleras de la piscina lentamente, como si debiese aguantar aún más y llegar al límite. Hasta encontrarse sumergida en el agua completamente desnuda. Nada boca arriba con los senos al aire y su sexo expuesto, observa el cielo y parece apuntar directo a su cuerpo. Desea darse vuelta y sentir el agua fría. Da dos y tres vueltas por la piscina, nadando y sus agujeros le piden más, desean abrirse.
Se sienta en las escaleras de la piscina, se acuesta boca arriba, abre sus piernas y expone su sexo y senos a quién desee observarla, a las aves, a las nubes... observa pasar un helicóptero en lo alto y sonríe. Ésto le produce excitación. Se sienta y toca su sexo. Ésta húmeda, muy húmeda, mucho más de lo que puede causar el agua. Se inclina de rodillas y empieza a saltar en el agua, salpicando con su culo como si estuviera montando una gran verga. Caen gotas a su culo, tetas, cara. Está feliz como un pequeño con un juguetito nuevo. Se revuelca, salta, nada, se lanza, salpica.
Captura el momento...
Nuevamente, escucha ruido de una motocicleta y vuelve a la realidad. Recuerda que pueden observarla y que para algunos no será agradable verla así, pero ella está demasiado húmeda para detenerse.
Así que sale de allí, desnuda, sube al balcón, toma su dildo, lo pega en una de las barras que lo asegura. Queda su culo expuesto sobre el dildo a las casas vecinas, sentada comienza a brincar en él con gran felicidad.
Su excitación es mayor y cae al suelo en 4 patas, expuesto su ano y sexo, imagina ser penetrada mientras la observan sus vecinos....
En aquel momento, escucha el sonido de un vehículo, su gloria a terminado.
Ella siente curiosidad al devorar un vouyerismo distinto, de esos que inyectan adrenalina por las venas...
Al frente de su casa ha llegado una pareja de inquilinos. Él, con algunos kilos de más, poco cabello y lentes oscuros como queriendo ocultar aquella vida pesada citadina y ella, de larga cabellera oscura, piel tersa, de gran porte, alta y sonriente.
Ambos interactúan con ella, con gran simpatía, aquella chica no demuestra celos y aquel chico demuestra interés en la Sucu. Conversan un poco a orilla de la piscina, y Sucu queda con una sensación extraña pero placentera.
Al poco tiempo, la Sucu sube al segundo piso de la casa, se da una ducha de agua helada, se encierra en su habitación y siente esa curiosidad por observar aquella pareja, su imaginación no tiene límites, sus deseos, tampoco.
Se desnuda, se acerca a la ventana, abre un poco la rendija y se topa con las grandes nalgas de aquella chica, quien se encontraba boca abajo sobre una toalla a orilla de la piscina. De la impresión, retrocede, no esperaba tan espectacular imágen y a su vez ya no puede evitar seguir observando.
Nadando en el agua se encuentra aquel chico quien asoma un poco la cabeza, alza la mirada y Sucu siente sus ojos enjuiciadores, se asusta, retrocede. Se avergüenza pero desea seguir observando.
Aún no la han visto.
Sucu intenta acercarse de nuevo a la rendija de la ventana y observa sólo a la chica quién continúa bronceando su piel tersa, bajo el sol abrumador con su mini bikini que parece ser absorbido por sus imponentes nalgas, su espalda es angosta y sus piernas son firmes y trabajadas.
Sucu piensa... ...
De nuevo se acerca el chico y la besa, saca su lengua y la chica la chupa, supongo que el chico imagina introducirle su falo...
Sucu retrocede...
pero su deseo de observarlos aumenta aún más...
Se acerca nuevamente a la ventana, configura la cámara de su celular y toma una fotografía a la chica pero se encuentra con sus piernas recogidas, obstruyendo la vista de esas bellas y gigantes nalgas...
Sucu imagina que las admiraria mejor sin bikini....Si tan sólo bajara un poco sus pier... lo hace como si escuchara sus peticiones... y logra ver una tela muy fina, delgada succionada por su culo... Ojalá se deslizara un poco hacia el lado, capaz que su sexo se ocultaria entre su trasero... Sucu quiere capturar esa imagen... pero la chica está insegura y sube nuevamente las piernas, tal vez, sospecha que la observan...
Se sienta y se da vuelta...
Sucu saca de nuevo su cámara fotográfica y captura una, dos, tres imágenes del cuerpo de aquella chica...
De lo que puede observar por encima del mini bikini se da cuenta que, sus senos son pequeños pero firmes, y sus grandes caderas....
justo aquella chica toma la crema de protección solar, se sienta y abre sus piernas...
precisamente en frente de Sucu...
La pone nerviosa, retrocede y avanza por temor a incomodarla...
Sólo quiere admirarla...
Tiene pensamientos y deseos de verla desnuda o... sacar el hilo de su bikini, y...
Que aquella chica use la lengua de ella a su antojo...
recuerda al chico sacando su lengua para besarla e imagina Sucu como sería si fuese su lengua pero en el sexo de aquella chica. Nunca ha probado uno pero su piel, su sonrisa y sus nalgas llaman a perderse en medio. Amplía la imagen de su teléfono y toma algunas fotografías...
Sucu empieza a desear lamer el sexo de aquella chica, se pregunta si su olor y sabor serán igualmente suaves a su piel (es primera vez que Sucu tiene éstos pensamientos) y a su vez imagina ser penetrada y castigada a nalgadas por aquel chico quien enfurecido la azota por observar y morbosear a su chica...
Llena de éstos pensamientos, Sucu empieza a observarla masajear sus piernas, abierta, como entregando su sexo, y se toca, presiona sus senos, estira sus pezones, siente como va mojándose... como su cabeza explota por más...
lleva su mano a su sexo mientras la observa por la ventana...
presiona su clítoris, sus jugos salen de su sexo... imagina estar encima de aquella chica, besándola, entrelazando su lengua, aquella chica succionando las grandes tetas de Sucu, al tiempo que muerde su cuello salvajemente, paseando su lengua, como una niña exploradora por cada partecilla de su cuerpo, humedeciendola lentamente, haciendole escapar pequeños gemidos, rozando su sexo con el de aquella chica, usando sus piernas, castigándola por exhibicionista y llevarla a ese nivel de lujuria, azotandola con fuertes golpes, al tiempo que la toma del cabello y la posee, la domina, la desgarra...
Sucu se masturba, no puede mantenerse en pie observándola e imaginando aquello...
Sus piernas tiemblan y cae al piso...
Ha tenido un orgasmo.......
Son muchas lunas de lobos aullando heridos intentando desfogarce en acciones lascivas y agresivas pero su temor al entorno, le hacen presa y víctima de su propia lascividad. Es la cárcel en la que se encuentra sometida su mente. Una fiera bloqueada, una fiera herida, una fiera enjaulada en el entorno, una fiera que no desea, una fiera que maldice, una fiera que ataca a cualquiera, una fiera que siente ha perdido su impulso.
Ella ha encontrado muchos obstáculos en la consecución de sus tareas, se frustra y desiste. Ella se deja seducir por el canto de los pájaros, las luciérnagas, el aire limpio alejado de la ciudad y el cielo estrellado. Admirando la grandeza del universo infinito y alejando sus deseos carnales de su piel herida y abierta... llena de llagas, cicatrices y ronchas producidas por los minúsculos insectos y las más grandes bestias que desean consumirla sin masticarla.
Ella se encuentra en medio del bosque a 35 grados de calor, con toda clase de insectos peligrosos. Ella nació en el Ártico, su hogar son las temperaturas frías. En medio del calor al que se ha tenido que someter, y a los depredadores, se encuentra vulnerable y agresiva.
Intenta mantener su deseo vicioso, obseno, carnal pero cada vez que da el primer paso para satisfacerlo juaz!!! Algo sucede y debe estar alerta. Ahora mismo que intenta cumplir una de las tareas, transmitirles un mensaje querido lector, un insecto ah adormecido su pata por lo que cojea, le arde, le pica, le rasca. No es satisfactorio la abrasion, ahora lo sabe, no es práctica que abrace con amor. Por el contrario, le incomoda y suplica a la luna que se termine esa tortura pero está lejos de su hábitat y debe caminar bastantes kilómetros para lograrlo.
Como dije antes, ella ha tenido varios obstáculos pese a su responsabilidad....
.... Andar sin ropa interior a 36 grados de calor, aparentemente suena más cómodo, pero la humedad que se desprende de su sexo es superior que en condiciones de temperaturas frías. Pensaría ud que es mucho más excitante al aumentar la humedad pero es aún más incómodo ya que el agua quiere escapar de prácticamente cualquier parte del cuerpo, esto irrita las zonas libres de vello corporal, produce alergia y picazon. No es sólo el sexo el que está húmedo, es la zona púbica, axilas, piernas, brazos, manos, etc.
Imagine Ud querido lector, encontrarse en medio de grandes matorrales, y que ud se desnude y un enjambre de avispas vuelen en su sexo, en su cara, en sus tetas, o se encuentre una cucaracha gigante de esas que se observan en entornos selváticos, o una hormiga, una araña del porte de su mano... El placer se apaga y se activa el instinto de supervivencia... pero no lo entiende, Señor porque Ud desea que lo complazcan y porque piensa que ella es masoquista...
... retomemos... La loba feroz, el hábitat ajeno y los depredadores.... aush... atacan!! Tampoco logré el cometido de finalizar éste.....
Se cae del trono que cree haber construido. No espera compasión ni un mínimo de preocupación. Sólo cuidados y comprensión. Ella entiende que ha tomado una decisión equivocada. Que los Reyes no son sabios, ni omnipotentes. Que bajo el escudo de una etiqueta, se autoproclaman guías, aún siendo inexpertos y depredadores...
Ella fantasea, ella elige. Ella toma sus propias cuerdas, y las suelta. Desilusión del mundo paralelo con el que ha fantaseado por las personas que lo conforman. O por el camino elegido. Muchos egolatras preocupados por satisfacer su propio placer. Al inicio, se muestran empaticos y sabios. Es la tierna voz de un depredador. Que de su agonía, goza. Que sus angustias no le importan.
Pero que se puede esperar de una pantalla y un teclado?. Mentes delirantes, sádicos, depredadores, animales en celo, atadores mentales, soberbios, deboradores sexuales, zombies sin alma.....
En ocasiones, ella es una niña caprichosa... hace su voluntad pero siempre tiene en mente acatar de la mejor forma posible los deseos de su señor. De su tortura, ambos gozan. Su humillación es su placer. Su ternura es su motor.
Tragicomica le decía. Ésta historia lasciva bordea el humor y también, limita el éxtasis. Como siempre, dispuesta. Enamorada de su rol. Curiosa de mente. Ansiosa de cuerpo.
Un día diferente a los otros. Ella se encuentra irritada, enojada, no lo comunica porque desea complacer y porque la dopamina que se liberará de la ejecución de la tarea solicitada, la hará olvidarse de su emoción. Decide liberarse de su negativa, de su enojo y dominio y se entrega.
La tarea era relativamente sencilla y al mismo tiempo, no. Su sexo empezaba a acostumbrarse, a expandirse. El dolor que le producía mantener una verga durante toda la noche se difuminaba en placer y no más que eso. Esa vagina traga vergas que palpita deseosa constantemente.
Se viste de verde, para confundirse con el entorno y evitar la humillación. De acuerdo a lo pedido, toma su dildo, 16cm insertables x 3cm de ancho (una verga promedio diria el humilde o una verga enana, diría el presumido, jajaja) Ud juzgue querido lector. Para ella, era suficiente, pues recién empezaba a adaptar su sexo a formas y tamaños.
Disculpe sí me desvío en mi intención descriptiva. Es mi interés, pueda imaginar los detalles de lo que le relato. Continúo. A escondidas, toma un vaso de agua lo deja un tiempo en el frío y después de ducharse, humedece su coño e introduce esa verga dura y falsa con huevos deformes. El agua tiene su efecto, le anestesia el sexo y esa vagina traga vergas la succiona fácilmente. Intenta salir de la ducha y caminar con esa verga pero los huevos se lo impiden, es incómodo, reniega de su dueño por esas tareas tan complejas y a la vez ríe puesto que imagina "que difícil es ser hombre", con huevos impidiendo el paso, y falos duros, gruesos obstáculo del camino. Piensa ello un momento, ríe y dice "a la verga con las vergas". Se lo saca y decide optar por un dildo un poco mas grueso y largo pero sin esos huevos molestos. Y piensa, "debe ser más fácil ser hombre sin huevos" jajajajajaja. Sin ánimo de ofender su masculinidad querido lector.
Lo introduce. Es un dildo vibrador en cuya base tiene una rosca que al girarla se acciona y comienza a vibrar. Lo introduce, se pone una tanga para sostenerlo, un jean (como es su costumbre) y sale a la calle.
Al inicio es incómodo en tanto no puede cerrar las piernas y le hunde a las entrañas, haciendo contacto con su vegija pero lo acepta y lo goza. Cada paso que da al caminar es un paso de adrenalina en su mente y de fluido en su sexo. Sus jugos comienzan a brotar por en medio de la tanga alrededor de su dildo cuando de pronto.... empieza a sentir que éste juguetito cobra vida y vibra!!, nerviosa, no sabe si detenerse o continuar. Detenerse sería un suicidio, muchas personas a su alrededor mirando menear el trasero. Continúa. Se pregunta ¿como pudo pasar?. ¿Por que de la nada su dildo cobraba vida?. Entonces recordó todo. Había dejado las pilas (batería) puestas y con el roce al andar, éste había cobrado vida. Intentaba rozar, girarse, contenerse para que se detuviera pero empeoró la situación. El nivel de vibración subió y el dildo por efecto de la gravedad, comenzaba a bajar, y como si tuviera destino, a rozar el clítoris.
Ella gemia mientras caminaba, se tocaba el pelo, la cara, sudaba, temblaba.
Estaba a punto de correrse en plena calle, cuando....
Si señores!!!!
La verga falsa salió de su vagina y se apagó. Ella maldijo al mismo tiempo que soltó una carcajada.
Había terminado su tortura al mismo tiempo que su placer. De esas dicotomias de la vida que uno no sabe que pudo haber sido mejor o que, peor!!!.
Viene el incómodo momento de sentirse hombre de nuevo, con un falo duro que se quiere escapar del pantalón. Intenta disimularlo, ocultarlo con su blusa larga. Agradece no tenga huevos. Pero no sabe como acomodarse. Será que mete su mano y lo saca de una buena vez. No!!!. Demasiado evidente. Entonces será que por encima del pantalón lo corre de abajo hacia arriba? o quizá hacia un lado? O hacia el otro?... ufff que tormento de nunca acabar y ni siquiera había realizado las compras.
Respira.
Acepta ser un macho.
Un macho excitado.
Jajajajajaja...
Abrazaos la mente como el cuerpo... encadernarlo, cuidarlo, es un niño frágil, es indefenso. Al mismo tiempo que lo es fuerte e independiente. No se anulara aunque me complazca. No se doblegara aunque se arrodille. Querrá saciar mi sed. Los ángeles visten de demonios. Los demonios exigen sacrificios. Si no brota la sangre, no obtienes recompenza.
Creiste que era fácil poseer una sucubo?. La sucubo te ha poseído. Le haz llamado ama sin saberlo. Le haz suplicado no se vaya. Los demonios son efímeros, cumplen su misión y vuelan. Un demonio no suele ser dominado pues su mayor estrategia es leer tú mente.
Una sucubo busca saciar su sed. La sed de sacrificio. De entrega. De complacencia. Te diriges a mi con un tono delicado, dispuesto a saciar mi sed. A llenarme de regalos y a extasiarme en un si, mi señora. Pero tú mente es rebelde, implora y reniega. Suplica y abandona.
No quiero un si, señora, temporal. Mundano. Vanal. Sin significado, obligado.
Vendrás a mi pulcro y sin objeciones. O no vengas.
Dispuesto a saciar mi sed. Sin remordimientos. Confiado en que darás lo mejor de ti, para mi. Tú sacrificio será mi mayor regalo. No quiero que seas una "diva" meneando tus caderas cuál niño intentado captar la atención. Quiero tu entrega pero quiero tú seguridad también. Piensa, no objetes.
Desapareceré sin previo aviso. Los sucubos no aparecemos ni desaparecemos con un aviso. Llegamos y nos vamos, en silencio. Porque si, porque es nuestra naturaleza.
De que forma osas decir que estás a mi pies cuando no eres capaz de cumplir si quiera una mísera tarea!!!. Piensa y entrega. Te quiero adulto en la vida, un niño en tu mente.
Sólo existes para complacerme. Sólo respiras para mi placer. Sólo sueñas de rodillas. Sólo hablas para alagarme. Sólo callas para escucharme.
Shhh, no digas!!!, no reniegues!!!. Ves como eres rebelde?.
Ven niño auténtico. Limpia mi casa. Adorna mi baño. Besa mis pies. Se un cachorro, sé un buen cachorrito. Salta. Juega. Mima. Gime. Llora. Menea tu cola. Así buen cachorrito.
Ven pequeñito, cuál será la cena para mi ésta noche?, como saciaras mi sed?. Ya sabes, no quiero migajas. Quiero un sacrificio.
Anhelaba ser presa fácil de aquel hombre fornido, espalda ancha, calvo, con barba, que sólo aparentaba rudeza pero era un niño en su interior. Las veces que iba a su encuentro, él al querer besarla, ella corría la cara con indiferencia, su mente estaba vacía, su cuerpo seco.
Recorre a la fiel guía de su señor para ser una buena zorra, una PUTA jugosa, apetitosa, con ganas de verga y de éste modo, entregarse a complacer.
"Serás un depósito de semen, quiero que seas su depósito de semen con dueño, deberás ir sin ropa interior. Vestir sin bragas y masturbarse antes de vestirse, es una orden!!!, llevar sostén es opcional", dijo su señor. Agregó, "Esta noche masturbece , corrase , tenga en mente una sola cosa , desde ahora su único fin es ser un deposito de semen". Ese pensamiento invadió mente y cuerpo la noche anterior. Desnuda en su cama, como cada noche, se entregó a su propio placer, corriendose tres veces en la noche y dos a la madrugada del día siguiente.
Despertó húmeda, brotando una fuente de lascividad.
Dispuesta a cumplir obediente su tarea, recordando que su único fin era ser un depósito de semen. Recordó también que la pulcritud era lo más importante y lavo su sexo. Antes de vestirse, desnuda, sobre su cama, tocó ligeramente su clítoris, pellizcando, estimulando, sin ir más allá pero alcanzando una ligera humedad. Primera orden, cumplida. El sol se asomaba, auguraba un día muy caluroso. Se vistió de jean como frecuentaba, sin bragas. Segunda orden, cumplida. Y finalmente, dispuesta a cumplir correctamente su tarea, vistió de remera larga oscura y una tela ligera encima para dar una pequeña seguridad a sus voluptuosas tetas que anhelaban rebotar libres al caminar. Sin ropa interior, sin pensarlo mucho, sin dejarse embargar por pensamientos negativos, salió de casa.
El viento soplaba fuerte y aquella tela delgada volaba cuál cometa, exponiendo su escote y tetas sueltas. Pese al temor de dar un paso, sus tetas se mantenían firmes, se resistían a bailar a voluntad. Cosa que le dio una ligera tranquilidad. Sensación de libertad sin la prisión de la ropa interior, cabeza en alto, erguida, caminaba con una sonrisa, burlándose internamente de la esclavitud mental en la que el mundo vive, al tiempo que se dirigía a tomar el transporte que la llevaría a encontrarse con aquél hombre. Pocas personas caminaban por allí.
Tomó el bus con el mismo ímpetu, se sentó y se entregó a la tranquilidad que emana la libertad de la ropa interior. Sin embargo, por culpa de las calles rotas, inevitablemente sus tetas bailaban de cuando en cuando, saltando, brincando, llamando la atención de algunos hombres, sentados al frente de ella. No bajo la guardia, no demostró vergüenza, sonrrio al ver el nerviosismo de esos hombres, que entre ojos miraban su escote y no podían evitar retirar la mirada de esas tetas saltonas pero que disimulaban verlas y se intimidaban con su mirada fuerte, penetrante. Uno que otro tragaba saliva (no puede imaginar sus oscuras perversiones al ver sus tetas bailando, gozando, riendo) y uno que otro intentaba bajar su erección que ya se empezaba a notar, soltando el pantalón un poco.
Dichosa, plena y húmeda anhelando verga, llega al lugar de destino. Toca a la puerta y la abre él. También es evidente su nerviosismo. Ésta hembra no cabe de la dicha al poner de rodillas a todos esos hombres. De leguas se veía que salivaba y sólo deseaba manosearla. Saluda nervioso, invita a pasar y antes de tener tiempo de cerrar la puerta, la embiste por la espalda cuál perro rabioso, tocando sus tetas, masajeandolas, apretando sus pezones, al tiempo que le dice al oido temblando... "viniste sin sostén" a lo que ella responde riendo, "y también sin bragas", activando su salvajismo instintivo, casi rompe el botón de su jean, baja su cremallera y toca su sexo. Goza, se deleita con aquel regalo. Chupa sus dedos y le dice al oido... "hueles delicioso mujer". Ella sonríe, ríe y le lleva nuevamente las manos a sus tetas y sexo, desea que le hunda los dedos en su vagina, está hambrienta de verga y desea ser usada. Recuerda las palabras de su señor... sólo quiere ser un depósito de semen.
Entonces el caballero le da vuelta salvajemente y mete su lengua en la boca de ella, jala hacia abajo su remera dejándo a la vista sus grandes tetas, se arrodilla ante ella y la succiona con pasión, succiona como si nunca hubiera probado unas tetas tan exquisitas. Se deleita. Chupa, muerde del gozo... mmmm... Ella gime cuando la muerde y apreta su cabeza contra su pecho. Desea cada vez más la posea. Él, mete los dedos nuevamente por su húmedo y palpitante coño, mientras muerde sus tetas. Se detiene. La viste, y dice, "mejor subamos, nos pueden ver". No estaban solos, pero a ese punto, a diferencia de él, a ella le importaba poco la vieran o no, sumergida en lujuria sólo deseaba ser usada. Él intenta morder su cuello pero queda atrapado en su cabellera.
Suben al segundo piso y saca una excusa para estar sólo unos minutos. Se la lleva a su oficina y la embiste nuevamente. Ella queda atonita de su frenesí. Será su aroma?, será que él puede oler su sexo?, su mente?... nuevamente mete su lengua simulando su falo, la retuerce dentro de la boca de ella, extasiado le pregunta si puede lamerla. Ella asiente. Y él le dice, "espera, quiero que cuando regrese, te desabroches el pantalón". Ella sigue su órden recordando las sabias palabras de su dueño... "estás para complacer a los hombres"... él cierra la puerta de su oficina, salvajemente baja el pantalón de ella, se agacha y lame su sexo, ella gime, jadea, babea. La besa para que ella pruebe su sexo y la obliga a arrodillarse. Ella está PUTA, zorra, caliente. Se inclina, el saca su verga con aroma a macho y la mete en la boca de ella. Ella empieza a lamerlo, chuparlo, succionarlo. Recuerda las palabras de su señor... "por lo menos una mamada", y "haga que ese hombre termine en su boca". Dando su mejor esfuerzo, en menos de un minuto de chupar su verga, éste empuja su verga fuerte a su garganta haciéndole tener arcadas y tragando su néctar, su semen. Ha cumplido su tarea. Es un depósito de semen. Extasiada por serlo, toma una foto a su señor del momento. Aunque plena, aún sigue húmeda sedienta de verga y orgasmo.
En ese momento irrumpe un cliente.
Se despide ésta humilde servidora más húmeda que antes, deseosa de ser penetrada, humillada en jugos, lamida, sucia. Al bajar las escaleras, ella siente que le toman por la espalda nuevamente, las tetas y meten las manos por su jean, penetrandola con varios dedos, ella gime, jadea, pide que por favor detenga su agonía, se inclina y su culo sin bragas roza su verga dura, erecta, ella menea su culo masajeando su verga. Él no la quiere soltar, ella no quiere irse....
Sale entonces a su casa, pero se detiene a un local a comprar ropa. Humillada en sus jugos, elige algunos shorts, baja su jean y se toca en el vestidor del local. Quiere tener un orgasmo pero sólo se toca para tranquilizar su deseo. Chorreando se prueba algunas prendas, algunas las deja impregnadas de su olor, de sus jugos, ésto le calienta aún más y en lugar de secar su sexo, la situación le produce mayor excitación, mayor humedad. Elige un par y se va a casa.
En el camino nota que al haber sido manoseada, su remera está más suelta, desordenada y su pelo alborotado. Sus tetas parecen brincar mucho más, están dichosas de haber sido tocadas y succionadas. Miradas de hombres y mujeres van de cuando en cuando. Ella pellizca sus pezones un poco para mantenerlos erectos. Su humedad no desaparece.
Llega al bus, se sienta y toca su sexo por encima de la ropa, sus piernas desean ser abiertas y sus tetas expuestas... le hablan, pasa por una construcción y saca una teta, se toca el pezon, un hombre queda asombrado y ella sigue su camino. Siente la necesidad de correrse ahí mismo pero se abstiene. Erecta sus pezones y se comporta como una PUTA, desea que sus pezones estén siempre erectos. Una buena zorra que es tomada fácilmente.......
Éste era un día frío y lluvioso. Despertó somnolienta con el sueño interrumpido y el cansancio perturbaba la mente. En la mañana los pensamientos lujuriosos se reducían a cero, mientras se encontraba en casa sin ropa interior. Será que ya se había adaptado?. No. Faltaba ese pequeño estímulo sensorial que llevara al éxtasis.
Al leer su mensaje todo cobro vida nuevamente. Aquella niña tímida despertaba del letargo de su psiquis cuando leyó de las palabras de su dueño detalladamente como deseaba ser usada. Algo se activó en ella. Y en consecuencia, la reacción de su tranquilo cuerpo. Algunos jugos empezaban a brotar de su interior. Y se intensificaban al tener permiso de tocarse y correrse de inmediato pues su cuerpo estaba seco, y su lujuria dormia ese día junto al sol. No podía permitirsele ese lujo. Era su objeto de complacencia. No debía bajar la guardia.
Entonces... recostada en su confortable refugio, cerro los ojos y se abrazo a la lubricidad. Acostada boca arriba, vestida, sin ropa interior, llevo sus delicados dedos sobre el camison de hilo y masajeo sus pezones. Éstos, reaccionaron al contacto, de forma inmediata, erectándose alcanzando la cumbre. Imaginando ser las manos de hombres extraños que querían poseer y domarla a su antojo. La piel pedía más. Y las manos bajaron al punto deseado. Con los dedos sobre los labios mayores de la vulva, sin tocar el interior, masajeando, pellizcando, estirando, burbujeaba la entrada de la vagina. Pedía a gritos ser tocada, pero no era el momento. Demasiado rápido.
En su mente yacían pensamientos respecto a lo dicho por su dueño, salir a algún lugar bohemio con falda corta sin ropa interior, dejando entrever su sexo, "interactuar, pero sin dejarse tocar , nada mas , calentarlos y sentir las manos de este debajo de su falda , de varios , cual puta fácil que se deja por ellos , una zorra que solo está para entregar sus agujeros . En la salida se topa con varios, la llevan a un costado del edificio , manosean y abusan de su cuerpo , en su papel de niña intenta resistirse pero se va dejando fácil , el placer y lujuria es demasiado fuerte , accede a sus miembros , su vagina chorrea de necesidad de esos hombres , asi se toman sus agujeros y por turnos la empiezan a tomar , cada quien un hueco de su persona , puede sentir el embate de cada uno , tamaño , grosor , énfasis , como se embuelven en lujuria solo por usted , su boca es usada , chorrea entre sus labios el semen del oral majestuoso que propina a cada uno"...
Su mente lasciva explota deseando ser poseída por su amo. Sus dedos se desplazan entonces en los labios interiores, apretandolos, rozandolos de arriba, abajo. Mientras más húmeda más deseaba ser propiedad de su amo. Ser presa fácil de esos hombres a quién su amo queria entregar, y brindar sus agujeros sin resistir. Introdujo un dedo en su vagina, luego otro y luego otro, ruidosa y cálida... burbujeante cada vez más húmeda, más lasciva, más mojada, saliendo aquellos gemidos de su boca, poseída en el deseo y sus pensamientos, una y otra vez penetrandose con sus dedos imaginando la verga de su amo, texturas, formas y tamaños de otros... No pudiendo contener más embarrada en sudor y placer...
Grita... soy tuya amo!!!... úsame!!!...
Esclava de mis pensamientos lujuriosos, lluviosa de deseo desperté ansiosa y expectante al nuevo día...
Era un día soleado, caluroso. Decidida a salir a la calle sin sostén, me puse una blusa con escote pronunciado, al mirarme al espejo, mi blusa tomaba la forma de mis senos y al caminar, tambaleaban de lado a lado, libres. ¡¡¡Nooo!!!, demasiado para mi psiquis, no podría soportar la humillación.
Así que busque el sostén más voluptuoso para resaltar mi escote, me vestí con la blusa y un jean rojo ajustado a la cintura, sin bragas. El día era muy caluroso, desee tener falda en ese momento para sentir la frescura del aire ventilando mi vagina pero no me es posible estando en la ciudad.
Salí con la misma expectativa del día anterior. Al dar algunos pasos, el roce de las costuras del jean comenzaban a hacer lo suyo. Sólo a unas cuadras de mi casa, ya empezaba a mojar mi intimidad. Llegue al taller donde repararian mi bicicleta. Toque al timbre y me abrio aquel hombre de apariencia descuidada, barba blanca, pelo corto y de aproximadamente unos 60 años de edad. Me fijé en que mi escote no pasó desapercibido ya que fue lo primero que observó de mi, aquel hombre. Conversamos poco y me dijo que aún faltaba incorporar el porta caramañola, así que se agacho casi a la altura de mi pelvis y me pidió sostuviera la bici. Me puse algo nerviosa al intuir que podía oler mis jugos, mi humedad, mi excitación, mis feromonas... esas anhelantes de carne fresca, de ser poseída... pero sólo respondió, alzando su mirada y sonriendo...
Le agradecí con sonrisa tímida y me sugirio probar la bici antes de irme para comprobar que su trabajo estaba bien hecho. No había considerado subirme y no era mi plan hacerlo, pues ésta acción podría causarme mayor humedad. Sin embargo, lo hice.
Monte mi bici como si fuera una verga, rozando la silla con expresión de placer, y el culo abierto, expuesto (también ansioso de ser follado). Me perdí un segundo en éstos pensamientos y volví a la realidad. Comencé a pedalear y recorrer las calles, sentía las miradas en mi culo, que al no llevar bragas, se hundía la costura del jean en medio del ano.
Llegando a casa, estaba completamente húmeda, humillada en mis propios jugos. Fui al baño, baje mi jean mojado, lo oli un poco, oli mi placer, un olor suave, atrapante y orine. Seque mi humedad, respire y mire mi celular. Era un mensaje tuyo, un mensaje guía para contenerme y magnificar mi placer. Me indicabas que podía pellizcar mis pezones y labios mayores de la vulva para tranquilizar mis deseos de tocarme y contenerme hasta la noche, cuando estuviera sola, desnuda. Fueron excitantes tus palabras y al mismo tiempo, una tortura, cada día quería más de ti.
Terminé de sacarme la ropa y me duche con agua tibia para tranquilizar mi mente pervertida. El jabón resbalaba con suavidad en mi piel y al llegar mis dedos a mi vulva y entrada de mi vagina la sentí húmeda y caliente. No fue suficiente haberla secado o lavado, parece que cobraba vida propia y quería más. No logré secarla completamente. Así que me entregué a su terquedad y la deje así. Al abrir mis piernas, noté que salían pequeñas burbujas en la entrada de mi vagina y hacian ruido, me hablaba. Pero recordé que debía contenerme, que debía aprender a aceptar ser el objeto de placer de su dueño. Respire. Suspire.
Me vestí entonces con un pantalón suelto para evitar rozar mi vagina y tranquilizarme un poco y como lo indicaste, me quedé sin sostén en casa para acostumbrarme a la sensación. Quizá de esa forma, mis pensamientos lujuriosos me dejarían en paz, al menos un rato. Pero no fue así. El pantalón suelto hizo que más aire entrara a mi vagina y que al abrir las piernas deseara ser chorreada de semen e intercambiar fluidos. Pero recordé, que debía contenerme lo más que pudiera pues entre más me contuviera, más puta, más zorra, más deseosa. Así que fui al baño, me seque, pellizque mis pezones y mis labios mayores para tranquilizarme. Subí mi pantalón. Respire.
Pero a los pocos minutos, de nuevo estaba húmeda y ya no podía aguantar hasta la hora de dormir o estar desnuda. De modo que me recoste boca abajo, deslice mi mano hacía mi vagina, húmeda, caliente y palpitante... leí tus palabras... "Despertar en la mañana, sentirse sucia , pero completa , sentir el cansancio de sus piernas , el temblor de ellas , como si el placer al cual fue sometida fue inmenso . Saber esta para complacer , su único objetivo es complacer . Salir con una falda , en la noche , una mano en los cachetes de su cola , una falda corta pero suelta , si el viento es memorable se puede ver parte de su sexo , su clítoris al presente , y solo seguir caminando , obligada a dar mamadas a su dueño en el parque , sabiendo otros estan pasando cerca pero no distinguen la forma de lo que sucede , ser tomada y usar sus agujeros luego , exibir su singular humedad , levantarse y seguir caminando , sentir como cae el chorro de semen por entre sus piernas al dar cada paso" e ida en el éxtasis... Me corrí en un orgasmo profundo e intenso....
Quisiera poder usar bragas de vez en cuando para no sentirme tan húmeda y puta todo el tiempo....