“Alicia, acuérdate que esta semana, te toca a ti el piso, que
ayer no te mataste mucho”
Son las 10 de la mañana, Alicia está haciendo un café en la
oficina, cuando recibe este SMS.
“No te preocupes bicho, soy consciente”.
Alicia, responde el día transcurre con normalidad, desde
hace unos días, Alicia hace el horario de verano, cuando llegan las 4 de la
tarde, sale de trabajar, piensa en el mensaje, Sergio no llega hasta la 7, así
que tiene tiempo de sobra y se va a tomar algo con las compañeras.
Son las 7 de la tarde, cuando Sergio llega a casa, ha sido
un difícil, está cansado le apetece darse una ducha y salir un rato a tomar
algo para desconectarse.
-Alicia, estas???
No obtiene respuesta, Alicia no está y no solo eso sino que
la casa esta tal y como la dejaron por la mañana “será posible, cada día mas
niña caprichosa”, piensa.
Suena el móvil de Alicia, está sentada en un terraza al
solecito de la tarde, echando una risas con las amigas “Se puede saber dónde estás?
en 15 minutos te quiero en casa”
Alicia, se pone blanca mira el reloj y piensa “que mal, se
me fue la hora, a ver cómo me libro de esta”, muy apresurada de despide de sus
amigas, con una mala excusa y se va.
En apenas 10 minutos aparece en casa, sin dar tiempo a
Sergio a decirle nada, dice
-Perdóname cariño…se me fue el rato, fui a tomar un café con
las compañeras y al salir me llamo Marta, no me di cuenta de la hora,
perdóname.
-Mi niña, ayer no hiciste nada y ya te lo pase, pero es que
hoy encima te he avisado.
-Ya…cariño... pero no te preocupes, yo me pongo ahora y lo
hago todo, no pasa nada.
-Pero eso no es princesa, tenías tiempo de sobra, que sales
a las 4!!!!
-Joooo si ya lo sé…pero entiéndeme…me entretuve, lo siento.
-Mira mi niña, ayer ya te columpiaste mucho, pero bueno un
día no pasa nada, pero dos seguidos, como que no, además por tu culpa ahora se
me estropean los planes, me apetecía mucho, darnos una ducha vestirnos, salir
un rato a cenar o al cine y después ir a tomar algo y ahora por los caprichitos
de la niña, me tengo que quedar!!!!.
-Que no, que me pongo y nos da tiempo, ya verás.
-Si es que ya se me quitaron las ganas señorita…ya veo que
contigo no puedo tener manga ancha, solo entiendes una cosa.
-Que noooo!!!
-No me contestes así, maleducada
-Tú también lo has
dicho
-Que no me repliques te digo!!!! Yo digo lo que me da la
gana, que sea la última o te enteras! que ya bastantes problemas tienes esta
tarde, así que no te busques más.
-Joooo, cariño…no te pongas así.
-No me dejas más opción, que castigarte.
-Jooooooooooooooooooo, dame una oportunidad….
-Sabes perfectamente que lo mereces, así que yo de ti lo
acataría sin rechistar.
Alicia, se queda mirando el suelo, juega nerviosa con las
manos, sabe que se lo ha ganado, pero también le gustaría librarse o al menos
intentarlo.
-Me das una oportunidad??
-Otra? Anda y vete el rincón a pensar, pero vuela!!!!
Mientras esta, en el maldito rincón del salón, ese que tiene
ya tan visto, oye como Sergio mueve las sillas, abre la puerta de un
armario y la vuelve a cerrar.
-Has pensado algo mi niña?
-Si….cariño
-Pues soy todo oídos
-Pues…que tienes… razón que debí hacer mis tareas, tú las
hiciste la semana pasada y esta me toca a mí, me sabe muy mal, que yo lleve 3
horas sin hacer nada y que cuando tu llegues este la casa patas arriba, cuando
me toca a mí.
-Entiendes que merece el castigo verdad?
-Si…..lo entiendo
-Bien, pues ya sabes, colócate apoyada en la silla, para
recibir tu castigo
-Si cariño.
Alicia, sabe perfectamente lo que Sergio quiere decir y sabe
que si el castigo es en la silla, es ella misma, quien debe bajarse los
pantalones y la ropa interior ,antes de colocarse, lo hace a sabiendas que en
caso de no obedecer, solo puede empeorar su situación.
-Bien, mi niña, me parece que tu falta de hoy, es bastante
seria, es una falta de disciplina, que debe ser corregida severamente, vas a
recibir 12 azotes con la vara.
Alicia traga saliva, sabe perfectamente que Sergio solo usa
la vara, para castigarla, cuando está enfadado de verdad, solo la ha usado un
par de veces anteriormente y solo en casos extremos, es consciente que el
castigo va a ser duro, se agarra con fuerza al respaldo de la silla, siente
como Sergio apoya la fría vara, en sus nalgas, calculando donde va a aplicar
los azotes, de repente el silbido de la vara cortando el aire y el impacto del
primer azotes resuenan en todo el piso, Sergio decide poner algo de música ,no
es cuestión de desvelar intimidades a los vecinos, aplica el castigo con
energía y sin compasión, esta vez Alicia, ni se mueve aguanta su castigo con
entereza, a pesar de que a cada azote, es como si unas cuantas avispas, la
picaran en sus nalgas, cuando termina el castigo, Sergio deja recuperar el
aliento unos instantes a Alicia, mientas observan las 12 líneas que las
atraviesas, algunas cruzándose entre sí.
-Levántate princesa.
Alicia lo hace buscando consuelo….no ha llorado, pero se
siente vulnerable necesita que la reconforten y la perdonen, hace el gesto de
ir en busca de un abrazo.
-Desnúdate de cintura para abajo!!!!
Alicia.. Obedece desconcertada….
-Ahora, vas a recoger la casa, que es lo que tenías que
haber hecho antes.
-Si cariño….
Alicia, abandona el salón, desnuda de cintura para abajo y
se pone a hacer lo que debería haber hecho antes ,al cabo de algo más de una
hora la casa esta impecable, Alicia vuelve al salón donde esta Sergio mirando
la tele.
-Ya he acabado, puedo vestirme ya?
-No aun, no de hecho no lo vas a hacer en lo que queda de
día, pero ven aquí siéntate conmigo y dame un abrazo.
Alicia, hace lo que Sergio le pide, de hecho lleva un buen
rato deseándolo…
-Sabes mi niña, al menos con algo de lo que había pensado
para esta tarde, no me voy a quedar con las ganas.
Los dos se miran y sonríen, pero lo que sigue ya es otra
historia, si alguien quiere seguirla en su imaginación es libre.
Fin.
El Muro