¿Recuerdan ese momento? ¿Podrían describirlo? Lo mío fue a los 15 años a una compañera de liceo de mi misma edad y en el pasillo, en pleno recreo. Ella -de un culo formidable que sabía lucir en vaqueros ajustados- me miró muy mal y casi me como una cachetada. Tuve suerte de que no me denunciara en la adscripción. Aunque a ese momento, la cosa no estaba tan complicada como ahora para nosotros los varones. Creo que desde ese instante supe mi condición de degenerado, la que llevo con mucho orgullo.