Usuario | Mminotauro |
Edad | 56 y.o. |
País | España |
Ciudad | Madrid |
Sexo | Hombre |
Rol | Dominante, Tutor/Mentor |
Buscando | Mujer |
Altura | 170-175 |
Peso | 70-75 |
Preferencias | Bondage, Spanking, Sex, Fetisch |
Que se debe saber sobre mí ..? | Me gusta vivir un BDSM único, creativo, cómplice y profundo donde lo sutil y el detalle tienen suma importancia. Donde un silencio o una pausa pueden someter tanto como un azote. Y donde la confianza sea siempre el punto de partida. Me gusta leer y debatir los manuales teóricos que intentan reglar el BDSM, pero no debes confundirte conmigo, no estoy a favor del BDSM mecánico y de manual. Las emociones y las relaciones personales si se reglan del todo pierden su esencia, y me gusta explorar con libertad. Cada sumisa es una mujer irrepetible y como tal debe ser guiada de forma única y diferente. Me gusta crear a través de la sumisa y no hacer lo que todo el mundo dice, sólo porque alguien lo escribió en un libro. Me gusta descubrir en la sumisa y dejarme sorprender por sus respuestas. Deseo perderme en una montaña rusa de emociones con ella, tocar el cielo y el infierno, ser ángel y diablo para ella, hacer de ella el Todo y la Nada, y no dejar de aprender nunca a su lado. Me gusta el protocolo, que disciplina la mente y el cuerpo, y embellece la entrega, pero cuidado, si el protocolo se adueña de una relación y el control de la sumisa es extremo y poco equilibrado, solo se consigue crear una marioneta. Y a mí las marionetas me aburren. Me gusta la sumisa que se compromete y esfuerza por mejorar, y que desea llegar a darse en cuerpo, mente y alma, pero lo que realmente me seduce de una sumisa es la mujer que habita en ella. Me gusta educar a la sumisa con firmeza y disciplina, pero no te equivoques conmigo, porque no pienso renunciar a ser yo mismo, afable, cálido, y natural. Detesto la sobreactuación y la teatralidad de algunos Dominantes. Y si no eres capaz de entender que detrás de una sonrisa pude habitar el mejor Amo del mundo, no te querré a mi lado. Me gusta explorar los límites de la sumisa. Pero explorar sus límites no es anularla. Explorar sus limites es descubrir en ella cada uno de sus matices, la geisha, la perra , la puta y la Dama. Los contrastes potencian los sabores. Yo someto para emocionar y emocionarme. Para crecer y que me hagan crecer. Y para conseguirlo pongo en juego mi sensibilidad y mi inteligencia, lo sutil y lo físico. Me niego a tener solo una muñeca hinchable o una marioneta. Busco explorar en la sumisa cada uno de sus matices. Y sentirme orgulloso de ella como MUJER. Amante del arte. Devorador de emociones. Coleccionista de paseos y charlas. Explorador de músicas. Inventor de frases. |
¿Tienes experiencia en el BDSM? | Si |