"Al besarte parece que se agitan mil diminutos dedos en el vientre; mil susurros eróticos que invitan a que en tu oscura intimidad me adentre; mil temblores de muslos que me gritan, exigiendo que me alce y me descentre. Y tu me besas repitiendo el grito, mi cuerpo ya a tu cuerpo circunscrito."
Francisco Alvarez Hidalgo