Saludos, gracias por la mención en el tema tratado, una de las dificultades que pienso que el castigo en los pies no salga aparentemente de lo tradicional es que también se debe tener conocimiento en lo que se puede hacer o no, dado que es un lugar delicado que puede dejar lesiones permanentes, esto con las consecuencia que puede reflejarse en otras partes del cuerpo según la reflexología está promueve el tratamiento de diversas afecciones a través de masajes entre otras áreas, la más conocida por la gente son la de los pies. De acuerdo con esta doctrina, los masajes provocan un reflejo en otras regiones corporales, permitiendo el alivio de un malestar, dicho esto, las torturas que llevan calor, agujas, falaka o bastinado, entre muchas otras, si no se manejan con cautela podrían producir lesiones en corto o largo plazo, ante el placer que produce para quienes somos masoquistas lo relacionado con el dolor se debe tener cuidado de quien la realiza, dado a que estamos amarradas y en muchos casos amordazadas y aun ante las señales de seguridad estas a veces, con la emocionalidad del torturador que puede tener en un momento más elevada, pueden pasar inadvertidas, es un tema fascinante y sería interesante captar mujeres ya iniciadas en esta fase para que cuenten sus experiencias, como las otras áreas de BDSM estas estarían clasificadas por grado de intensidad y cada quien donde se ubique deberá tener mayor información para tomar las medidas respectivas, habría más que contar pero creo que esta es la información elemental. Para
Bitesoles y su intriga hacia las torturas en mis pies, se la debo para otra intervención, Pliss... que sería la súplica en inglés cuando una está indefensa atada y entre la mordaza podría apenas oírse un Pills o un, No Pliss...
Un adelanto, descansando mis pies después de una larga sesión de tortura. Chao