La
sumisión mental es la gran desconocida dentro del BDSM, sin embargo es la
sumisión más importante, pues cualquier tipo de sumisión acaba y empieza en la mente sumisa, entonces...
¿QUÉ ES
LA SUMISIÓN MENTAL?
*Es ante
todo un SENTIMIENTO AMOROSO.
Una unión
o fusión intensa con el Amo.
*Es un
ESTADO DE LA MENTE. Es decir, no es una entrega material de algo tangible como ocurre con la “sumisión sexual“.
*Es una
ACTITUD: Los que hayáis tenido hijos
quizás comprendáis la actitud de una
madre con su bebé. Su bebé es “su“vida. Está atenta a él, lo siente en cada momento. Pues bien, la sumisión mental
lleva a la sumisa un sentimiento muy
parecido con respecto a su Amo.
*A medida
que la sumisión mental aumenta, se produce un sentimiento de PLENITUD y
curiosamente un sentimiento de LIBERTAD en
la mente sumisa.
Plenitud
porque su mente esta llena de amor hacia su Amo, y de libertad porque ha llegado a un estado de sumisión en el que
la con fianza se ha instalado en su
corazón. Su mente está poseída por su Amo y esto la libera de dudas y temores.
Además la libera -al realizarse- de esa necesidad profunda de
entrega.
*La
sumisión mental es casi siempre un ESTADO más PERMANENTE y que va más allá del ámbito de una sesión. A medida que su
mente está más sometida la persona sumisa se encuentra más llena y poseída por
su Amo en casi todo momento.
*Una
sumisa me ha hecho especial incidencia en que el estado de sumisión mental
presupone CONFIANZA:“La sumisión mental yo la relacionaría con la persecución de esa confianza ciega que
borra de la mente las dudas. Una confianza profunda e instintiva“.
*Algunos
autores asocian la sumisión mental a la SINCERIDAD y a la entrega al Amo de
todo lo que sucede en su mente sumisa. Esto ya se da por descontado.
Nadie
puede imaginar la sumisión sexual sin la entrega de su sexo. Nadie puede
imaginar la sumisión mental sin la entrega de lo que pase por la mente sumisa
ALGUNAS
CURIOSIDADES QUE AYUDAN A COMPRENDER QUÉ ES LA SUMISIÓN MENTAL
*LAS
COINCIDENCIAS CON EL MISTICISMO RELIGIOSO. Si queréis comprender con exactitud
que es la sumisión mental llevada a su máxima expresión, estudiad los textos
del misticismo religioso.
Algún
día, alguien tendría que estudiar las increíbles coincidencias que hay entre el
misticismo religioso -las reglas, los niveles, el lenguaje, los nombres de
algunas órdenes religiosas etc. y nuestro mundo.
*LAS
ESCENAS DE HUMILLACIÓN. Es curioso que algunos coincidan en que las escenas de humillación aumentan enormemente el
“estado de sumisión“. Se explica porque la persona sumisa, al verse en la
aparente contradicción de disfrutar
de humillaciones, la sitúa en un estado de profunda humildad que posibilita a
su vez una entrega más limpia de dudas y barreras.
¿CÓMO SE
LOGRA LA SUMISIÓN MENTAL DE LA PERSONA SUMISA?
Así como
hay muchos textos sobre cómo lograr todos tipo de sumisiones: En el movimiento,
en la voz y sobre todo la sumisión sexual, no he encontrado casi nada sobre
cómo lograr la sumisión mental.
La razón
es muy sencilla: La sumisión mental se logra como resultado de TODAS las
sumisiones. No hay un camino o mejor dicho sí lo hay, es el conjunto de todos
los caminos los que al final llevan a la sumisión mental.
Por eso
yo digo que la sumisión mental es la sumisión de sumisiones y el destino final
de todas ellas.
En
definitiva, he encontrado pocas TÉCNICAS DE ENTRENAMIENTO específico de la sumisión mental. Aquí apunto
alguna:
*Algún
autor incide en la necesidad de:
INTROSPECCIÓN
de la sumisa, analizando su mundo
interior, sus emociones, sus miedos, sus dudas, meditando sobre cómo mejorar su comportamiento. Los diarios se
apuntan como un instrumento valioso en este sentido. Estamos hablando de
diarios en los que la sumisa refleja su mundo
interior, sus dudas, avances y retrocesos en su camino hacia la sumisión. Estos
diarios son efectivos si son revisados a menudo por el Amo y la sumisa,
comentando los obstáculos, los avances y retrocesos hacia la sumisión perfecta.
*Las
escenas de ADORACIÓN:
La
contemplación casi mística del Amo es un ejercicio de sumisión mental.
*Se habla
mucho en la red de un estado mental especial llamado SUB-ESPACIO
. Se
suele experimentar durante una sesión SM especialmente intensa y en él la
persona sumisa entra en un estado alterado de conciencia. Hay varios grados de
subespacio. Una sumisa llega a ser mucho más maleable a la dominación en esos
momentos, por ello algunos piensan que es un estado intensamente sumiso.
Tengo mis
dudas sobre si esa experiencia aumenta el
grado de sumisión mental de forma permanente después de la sesión, porque se ha
de tener en cuenta que su estado está provocado por unas substancias dopantes
que el mismo cuerpo segrega (endorfinas). Su discurso mental está alterado . No
creo que una experiencia de este tipo aumentara la devoción hacia su Amo de
manera tan significativa y permanente como el que sentía durante la sesión.
*Personalmente hay un procedimiento que he escogido
del
misticismo religioso que recomendaría: La MEDITACIÓN diaria y placentera sobre
el Amo, asociándolo siempre a sensaciones agradables. Las cibersumisas ya lo hacen:
Casi siempre se van a dormir pensando en su Amo, asociando su imagen al estado
placentero en que las ha dejado la sesión que acaban de tener con Él. Asocian
entonces la imagen del Amo a algo tranquilo, luminoso y sobre todo bello. Es
una sensación de amor intenso .
*Por
último quiero hacer especial hincapié en el tema ÉTICO
. El BDSM
es un sistema de relaciones personales muy equilibrado. El Amo recibe la
entrega de la mente sumisa pero al mismo tiempo carga con la responsabilidad de
ser el digno recipiente de esa entrega. Aunque en una relación BDSM el
crecimiento personal ha de ser mutuo, considero que el Amo, al poseer la mente
sumisa está especialmente obligado a ayudar en su crecimiento, de manera
positiva y en todos los aspectos.
Estoy
hablando de auténticos Amos, personas responsables y sanas, que se ganen el
respeto de su sumisa por una actuación ética, digna, no de patéticos payasos
-que últimamente pululan mucho por la red- que creen que ser Amo es escudarse
detrás de un látigo y decirle cuatro palabras soeces a la sumisa vengan o no a
cuento.
La
sumisión mental es el estado superior y último de las sumisiones, la más
maravillosa y placentera de ellas, pero también la más delicada y con más
riesgo de sufrir daño. Recomendaría a las sumisas que antes de hacer esta
última y definitiva entrega se preguntaran si su Amo se la merece por haber
ganado su respeto con una conducta ética y digna hacia ellas.
EL FARO
El Muro