Las lluvias son prácticas muy populares dentro del BDSM, a lo largo de los años creo que solo me he topado con un par de sumisos que no fantasearan y anhelaran recibirlas.
Hay varios tipos -las cuales enseguida detallaré- y todas ellas conllevan una cuota enorme de humillación entre otros motivos, por hacer del sumiso receptáculo de nuestros desechos.
Por esto mismo, al tratarse de desechos corporales, hay que tener en cuenta los riesgos que conlleva y las medidas a tomar para hacerlo del modo más seguro.
Para algunos solo implica el dejar caer los fluidos sobre la piel de los sumisos, sin que haya ingesta de la misma pero para otros el placer radica justamente en la ingesta (cosa que potencia los riesgos para la salud).
También hay que tener en cuenta el lugar donde se lleven a cabo por cuestiones de limpieza y practicidad a la hora de poner todo en orden luego de la sesión y para evitarnos malos ratos o consecuencias desagradables.
Las más suaves
Lluvia Plateada:
En este caso se trata de lluvia de saliva, la más inocua y segura de todas, ya que conlleva más o menos los mismos riesgos de un beso. Puede tratarse de escupitajos o un simple y suave goteo.
Lluvia Banca:
¿Adivinan? Pues sí, semen. Consiste en lo que están pensando, eyacular encima de l@s sumis@s. En el caso de la femdom puede ser de un sumi a otro, de otro dominante, o cualquier otro hombre, incluso del mismo sumi (hay penes falsos que vienen con un dispositivo para simular la eyaculación).
Lluvia de Leche:
Se que el nombre puede hacernos creer que se trata de la blanca pero no, se trata de simplemente de leche, leche materna. Por supuesto no es tan fácil de practicar pero justamente por eso quizás sea que seduzca más.
La más popular
Lluvia Dorada
El fluido en cuestión, como la mayoría ya sabe, es la orina. Relacionada también a lo ritual, por aquello de “marcar territorio” como suelen hacer los lobos alfa con su orina para reafirmar su poder y liderazgo.Por tratarse de la más común y la más practicada amerita un artículo aparte.
Las más bizarras
Lluvia Marrón:Creo que ya el color nos da una idea, se trata de excrementos. Esta es mucho más fuerte que las anteriores. y hay que tener en cuenta que el olor de por sí ya puede producir náuseas, arcadas e incluso vómito. Supongo que como todo, será cuestión de acostumbrarse.
Lluvia Roja:
También el color puede darnos una idea de lo que se trata, del sangrado menstrual (generalmente acompañado de la lluvia dorada para facilitarlo). Hay que tener en cuenta que la sangre menstrual para varias culturas tiene un poder inmenso relacionado en la mayoría de los casos con la luna y la fertilidad (vida) por tanto puede llegar a tener una connotación ritualista muy grande este tipo de prácticas.
Lluvia Multicolor (o Ducha Romana):Se trata del vómito, a mi entender la más asquerosa y bizarra de todas, ya los excrementos me dan bastante asco pero esta lo supera ampliamente. pero como siempre digo, para gustos, los colores… Hay quienes planifican qué tipo de alimentos se ingerirá, el tiempo pasado entre la ingesta y la práctica y detalles similares para darle los colores y la consistencia deseada.
Por favor recuerden que se trata de desechos del organismo, que contienen microorganismos perjudiciales y que pueden ser causantes de enfermedades. A tomar siempre las medidas de seguridad pertinentes.
A cuidarse y vivir el BDSM plenamente, que siempre nos de placer y no problemas.
Les dejo un texto escrito por un sumi (JPR) acerca de su visión de la lluvia dorada.
“A lo largo de la evolución de la humanidad la micción se ha vuelto algo íntimo, algo que no se suele compartir con los demás como lo era en nuestros orígenes primitivos donde se hacía con más libertad. Nos hemos vuelto más pudorosos y respetuosos de dicha intimidad. Por esta razón, aunque es de algún modo humillante ser merecedor de sus desechos inútiles, de que me vea como un inodoro humano, el hecho de que Usted Señora, pueda contemplar la idea de compartir esa intimidad conmigo, lejos de hacerme sentir indigno logra todo lo contrario, logra unirme más a Usted, me haría sentir aún más esa asimetría tan nuestra y conectar a un nivel que aunque denigrante es a su vez excelso.”
El Muro