Cada Dominante tiene su propio método de
enseñanza, es válido para él siempre y cuando le ayude a facilitar el
aprendizaje de la persona sometida.
El Dominante busca un mecanismo mediante el
cuál el sub aprenda y vaya perdiendo el miedo a los juegos, entre otras cosas,
con este método se busca tambien que no se corran riesgos innecesarios.
Este proceso de aprendizaje debería ser
algo placentero, satisfactorio y necesario para ambos.
La pareja deberia tener un proceso de
conocimiento mutuo previo al inicio de la relación, para identificar
fortalezas, debilidades, temores, límites y expectativas.
En el contexto BDSM adquiere una dimensión
podría decirse más especial, porque el Dominante es alguien que disfruta
controlando al sumiso y ha hacerle experimentar el gusto por dicho control,
procurando que se sienta seguro, confiado y cuidado al practicar cualquier
actividad y que de esta forma la pueda llegar a disfrutar.
Aunque en principio algunos de los
iniciados en el arte de la Dominación parecen "nacer sabiendo" de
ciertas técnicas aparentemente conocidas y sencillas, la realidad es muy
distinta.
Los comienzos de muchos de nosotros se han
alimentado de libros, fotos, internet o incluso conversaciones con otros más
avanzados, pero pocos somos los que nos interesamos por averiguar, preguntar y
practicar antes de, aquellas cuestiones que se presumen simples y a la hora de
la verdad no lo son.
Cualquiera que empiece a leer sobre BDSM o
a interactuar con Dominantes y sumisos, se encontrará con el término SSC
(sensato, a menudo traducido como sano, seguro y consensuado), que se ha vuelto
uno de los eslogan más importantes en este mundillo, defendido a capa y espada
por gran parte de los Dominantes y los sumisos, incluso hasta el punto de considerar
que aquello que no es SSC, no es BDSM.
Sin embargo, el eslogan SSC tiene el
problema de la subjetividad, ya que no para todo el mundo las mismas prácticas
son sensatas o seguras.
Hay que tener en cuenta que de opiniones
diversas esta vestido el mundo.
Muchos practicantes afirman que el BDSM es
como una droga, entre más la practicas más y más deseas seguir haciéndolo,
cuanto más estas a punto de llegar a límite, más deseas y sigues intentando
para rebasarlo.
Y no es que este mal superar los limites,
al contrario es positivo ir dejando miedos, superando obstaculos siempre y
cuando traigan beneficios y se de de manera consensuada, por lo que las medidas
de seguridad deben reforzarse y amoldarse a cada paso nuevo que se da.
Cuando no se dan esas medidas de seguridad
mínimas y básicas, ello conlleva a situaciones peligrosas que se traducen luego
en marcas permanentes, lesiones, o incluso visitas al doctor, eso desde el
puntode vista fisico, ya en la parte emocional y psicológica se genera una
sensación de inseguridad que se proyecta, afectando la relación y posiblemente
otros factores en la vida de ambos.
Actuar de manera sensata es la mejor medida
de prevención para evitar que se corran riesgos innecesarios, esto acompañado
del consenso hará que prevengamos problemas y secuelas no deseadas.
Conocer los riesgos, consensuarlos y
prevenirlos es un tema que debe negociarse antes de cada encuentro.
Otro requisito esencial para impedir el
riesgo innecesario es el respeto de los límites que cada cual haya establecido.
Traspasar esos límites es ponerse en
peligro y arriesgarse a caer en una situación incómoda, indeseada e inesperada.
En estos caso el uso de la plalabra de
seguridad, el conocimiento mutuo, la comunicación eficaz y el entendimiento son
importantisimos, porque al notar un movimiento, algún sonido, una reacción
diferente, podremos notar que se está rebasando el umbral de aguante del sub y
se debe detener un momento la actividad y verificar si todo esta bien o si la
pausa debe prolongarse más, se debe hacer algún cambio o incluso si se debe dar
por terminada la sesión. ®
Sátiro Demencia
El Muro